Tras la emocionante, embriagadora y no tan normal historia de “amor“ qué albergó al anterior libro (50 shades of Grey) la autora vuelve con el segundo volumen de la trilogía, un libro un poco más pasivo que te dejará con un cierto sin sabor en la boca o te dejará con ganas de comerte el ultimo de los tres libros que componen esta historia, dependiendo del tipo de lector seas.
Tal y como lo decía su sinopsis, en este libro iban a dar un vuelco total los protagonistas de la historia. Se pondrá a prueba cuanto amor y deseo hay en estos dos individuos (Christian Grey y Anastasia Steele) que volverán a unir sus vidas después de una serie de eventos desafortunados, más qué todo para Anastasia.
No entraré más en los detalles del libro porque no me gustaría dañarles la lectura de este.
A mí en particular me pareció bueno, no tan bien pera mis expectativas pero me gustó esa nueva perspectiva de vida qué cada uno asume en ésta cambiante historia.
Si leyeron el primero les recomiendo leerse este segundo libro y posteriormente el último qué ya inicie y que les digo los sorprenderá por el rumbo qué ha cogido la historia.
SINOPSIS:
Intimidada por las peculiares prácticas eróticas y los oscuros secretos del atractivo y atormentado empresario Christian
Grey, Anastasia Steele decide romper con él y embarcarse en una nueva carrera profesional en una editorial de Seattle. Pero el deseo por Christian todavía domina cada uno de sus pensamientos, y cuando finalmente él le propone retomar su aventura, Ana no puede resistirse.
Reanudan entonces su tórrida y sensual relación, pero mientras
Christian lucha contra sus propios demonios del pasado, Ana debe enfrentarse a
la ira y la envidia de las mujeres que la precedieron, y tomar la decisión más
importante de su vida.
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